Enel Colombia, con el objetivo de asegurar la calidad del servicio y evitar las interrupciones causadas por vegetación y ramificaciones, destinó en 2022 cerca de 30.500 millones de pesos para las labores de poda y tala en Bogotá y Cundinamarca. A lo largo de este periodo, se llevaron a cabo 289 mil intervenciones y se espera que en el primer semestre del 2023 se ejecuten unas 135 mil podas y talas adicionales con una inversión de 12.100 millones de pesos; 124 mil para Cundinamarca y 11 mil para Bogotá.
El retiro y limpieza de vegetación que interfiere con redes eléctricas se realiza con el fin de disminuir las interrupciones en el servicio de energía y evitar afectaciones para la comunidad y para las personas que realizan el mantenimiento.
“Nuestras redes tienen contacto con vegetación considerando la geografía y condiciones climáticas de las zonas donde tenemos presencia tanto en Bogotá como en Cundinamarca. Se estima que tenemos más de 900 mil árboles en cercanías con nuestras redes, de los cuales contamos con registros de casi medio millón. Si bien, estas acciones de talas y podas las realizamos con autorización de las autoridades ambientales, también somos conscientes de la importancia de la vegetación para los ecosistemas y por eso implementamos acciones de compensación con la resiembra de árboles en varias zonas de nuestra área de influencia”, indicó Dora Alba Ruge, subgerente de operación de infraestructura y redes de Enel Colombia.
Para poder realizar este proceso, la compañía tramita los permisos correspondientes ante las Autoridades Ambientales y se aseguran, además, de no intervenir más del 30% de la copa de los árboles, manteniendo su estabilidad y vida. Así mismo, Enel Colombia establece compensaciones de acuerdo con lo solicitado por la Secretaría Distrital de Ambiente por cada tala efectuada en el Distrito Capital y en Cundinamarca realiza la siembra de cinco árboles por cada tala ejecutada. En las zonas rurales, las compensaciones se realizan según los lineamientos de la Secretaría del Hábitat y las Corporaciones Autónomas.
Además, la Compañía dispone de personal especializado y con conocimientos relacionados con la identificación y gestión de riesgos. Entre los aspectos más importantes para la prevención de peligros potenciales, se encuentra el reconocimiento e identificación de los diferentes niveles de tensión: alta, media o baja; los diferentes tipos de redes: telecomunicaciones, eléctricas o subterráneas; y los distintos tipos de conductores o cables.
“Actualmente, tenemos mapeadas alrededor de 10 especies de árboles y vegetación protegida por la legislación local y/o nacional, por lo que realizar actividades de poda o tala en estos casos, no es viable. En este sentido, hemos tomado algunas acciones dentro de nuestro plan de inversión para fortalecer las redes de baja tensión a través de una técnica de trenzado del cableado o también con el encauchetado de la red para aislarlo de manera total o parcial, mitigando las afectaciones en el servicio por causa de ramas que toquen las redes”, concluyó Dora Alba Ruge.
Es importante resaltar que no se recomienda realizar este tipo de trabajos sin autorización previa de Enel Colombia, ya que representa un riesgo inminente de electrocución por cercanías a la red. El personal de la compañía debe contar con protección como casco, botas, gafas, guantes y overol al realizar estas labores, así como con las herramientas de poda y tala fundamentales.