La Secretaría de Medio Ambiente ha rescatado, en las dos primeras semanas de enero, cerca de 500 aves migratorias que por esta época encuentran en Bogotá y sus alrededores un lugar para descansar en su largo viaje de un extremo al otro del continente.
Los primeros meses de cada año llegan miles de aves migratorias a Bogotá. Las tinguas azules son especímenes que por estos días hacen presencia en diferentes ecosistemas como parte del recorrido migratorio.
«Estamos en la temporada migratoria de nuestras tinguas, muchas de ellas se desorientan en el camino y nosotros estamos prestos a atenderlas. En esta época hemos tenido un incremento muy alto en el reporte de aves, de cinco reportes diarios hemos pasado a tener hasta 50. Estamos tratando de atenderlos todos con la mayor prontitud posible«, aseguró la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
Durante las dos primeras semanas de enero, han llegado a la ciudad un mayor número de tinguas azules que el habitual para esta época. En octubre se recuperaron 12 individuos; en noviembre, 83; en diciembre, 179; y en lo que va corrido de este año van más de 408 especímenes rescatados (a corte del 15 de enero).
Las aves migratorias, en especial la tingua, son animales que, debido a su alto desgaste energético, pueden extraviarse y terminar en tejados, parques o en vía pública, cansadas y desorientadas. Dicha situación ha generado un incremento en los reportes por parte la ciudadanía.
«Estamos recibiendo reportes de tinguas todos los días, puede haber ligeras demoras producto del incremento de aves migratorias y por las condiciones de alerta roja que hay en la ciudad. Mientras tanto, en la página www.ambientebogota.gov.co pueden encontrar las medidas necesarias para cuidar las tinguas mientras los profesionales pueden llegar a recogerlas«, agregó la secretaria de Ambiente.
Gracias al llamado y alerta de la ciudadanía, desde octubre del año pasado hasta el 15 de enero de 2021 la Secretaría de Ambiente ha recuperado 682 aves que han sido trasladadas al Centro de Atención y Valoración de Fauna. Una vez rehabilitadas, las tinguas son liberadas para que puedan continuar con su recorrido migratorio.
La campaña de «Recuperación y liberación de la tingua azul (Porphyrio martinica) en Bogotá«, que se viene realizando desde el 2000, tiene como objetivo rescatar y rehabilitar todos los individuos de esta especie que suelen sufrir accidentes contra estructuras y tejados.