Entre mayo de 2024 y marzo de 2025, más de 100.000 vehículos fueron inmovilizados en la capital por infracciones de tránsito, según denunció el concejal Julián Forero. Basado en un análisis del sistema de grúas y patios del Distrito, Forero identificó las cinco conductas que más generaron remisiones y que, además de un alto impacto económico para los ciudadanos, representan beneficios considerables para el operador privado GYP S.A.S.
La infracción más común fue estacionar en sitios prohibidos (código C02), con 35.204 vehículos remitidos a patios. Le sigue la omisión de la revisión técnico-mecánica (C35), con 35.064 casos. Ambas faltas implican multas de $604.100.
En tercer lugar, se encuentra conducir sin el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (Soat) vigente (D02), con 18.028 casos, cuya sanción asciende a $1.207.800. El listado lo completan circular por vías restringidas o en horarios prohibidos (C14), con 12.560 remisiones, y el uso de vehículos particulares para prestar servicios mediante plataformas digitales como Uber o Didi, sin la debida autorización (D12), con 8.796 sanciones.

Forero cuestionó el modelo económico que sustenta este sistema de control, asegurando que el operador privado retiene el 82,17 % de los ingresos generados por los traslados a patios. “Las grúas se han convertido en una fuente constante de ingresos, más que en una herramienta de control vial”, afirmó. Solo en 2024, el mal parqueo generó más de $37.000 millones en sanciones. En los primeros tres meses de 2025, esta infracción ya suma más de 20.000 casos.
El concejal también criticó la priorización de estos operativos tras la caída en el recaudo por fotomultas, afectado por la exigencia de señalización previa en las cámaras. “Los conductores se han convertido en el blanco de una estrategia centrada en el recaudo”, señaló, al tiempo que pidió una revisión del modelo de concesión que, según dijo, desincentiva un enfoque preventivo y equitativo en la gestión del tránsito urbano.