Idiosincracias e incrucijadas de una nación en vía de cambio social e identidad política

América Latina continente de pueblos soñadores de esperanzas, lleno de un capital humano mutante, con gran capacidad de desarrollo, cuna de libertades que añoran su culminación con la fuerza de su resistencia, es emporio de riquezas que nuevos colonos criollos usufructúan.

Por Mariano Sierra S.

El comportar social y político en el país está causando temores, miedos y todo tipo de distenciones que hacen imposible el vivir armónico. La unidad histórica de nuestros pueblos nos llena de idiosincrasias que nos llevara a desplazarnos buscando no perder la solidaridad, fortalecer nuestros corazones de carne que vienen siendo endurecidos por infernales logos llenos de satánicos perversos.  El modo de ser de nuestros pueblos viene reclamando su independencia lo que otrora imperio le arrebató, surgiendo un nuevo conglomerado resistente, ávido de luchas en medio del dolor y la hegemonía de poderes, ante el realismo de la doble moral.

Como ignoramos la historia. Acordémonos que Bolívar sufrió los improperios del imperio USA. Que como siempre en momentos trágicos lo único que hicieron fue devorar nuestras riquezas, sed que aún mantienen, no dan puntada, pues tienen el dedal dispuesto para irse lance en ristre contra el débil, ellos mantienen la supremacía para someter en medio de ficciones, de imaginarios, de ilusiones que hipnotizan con economías naranjas o algo por el estilo como la seducción.

De la colonización el país como otros pueblos, se pasó a la Republica, en medio de comedias constitucionales y patria boba, pero este paso no genero ningún matiz y lo contrario,  hechos fácticos ahondaron aberrantemente el proceso bajo estultos propios llenos de entrampamientos como se precisa en lecturas de historiadores como Pablo Montoya que con epifanías patéticas ilustra conductas  palmarias de algunos proceres- La seudo democracia que da inicio a la Republica se  aviene con rupturas donde se aprecian decisiones utópicas llenas de avances sin contenido de gobierno, cual quimeras rumbo a la nada.

América Latina continente de pueblos soñadores de esperanzas, lleno de un capital humano mutante, con gran capacidad de desarrollo, cuna de libertades que añoran su culminación con la fuerza de su resistencia, es emporio de riquezas que nuevos colonos criollos usufructúan. América pionera de grandes luchas, abre caminos de paz para brindarle al mundo el alimento material y espiritual, pues se ha forjado en la sobrevivencia en medio de una servidumbre decadente gracias a las revoluciones de cambio que se avienen nutriéndolo con su vigor social dentro de un prisma de idiosincrasias y un complejo imperioso para enfrentar toda encrucijada.

Todo empieza y todo acaba, efímera vida de contrastes que nos conducen al retorno. Un rey dijo esto a su hijo en su lecho de muerte…He aquí donde acaba todo, incluso la monarquía…. Mentira y engaño penetran negativamente en el alma humana escenificando comedias llenas de claros oscuros, de apariencias satánicas donde la condición humana se enaltece de poder al margen donde se perfilan bufones políticos cuya misión de gula dan vida a partidos y movimientos fantasmagóricos. El comportar existencial induce al encuentro del yo con el nosotros, y sus experiencias permiten elegir procesos de paz ante una nueva   convivencia pacífica.

La disciplina social brota dándonos oportunidad para repensar las luchas de las bases. Esta lectura resalta los resultados para ubicar los puntos de partida que nos enfrenta a las contradicciones propias de los estados y sus discursos que conducen a encontrar las raíces de los problemas sociales. La memoria hace relación entre colectividad y la correspondencia con la verdad histórica, el pensar comunitario, sus necesidades y la participación como actor de lucha con pujante activismo donde sobresale el afán de todos por la defensa de la naturaleza, que cada día sufre estertores de muerte, solo comedias, parodias de imperios quieren mostrar su lucha, pero lo único que hacen es acelerar su muerte y con ella la del hombre.

Muchos son los vituperios contra los cambios que hoy hacen presencia universal. Esa es una forma equivoca de manifestar ataques, al contrario. La altura espiritual y de ser, la debemos mostrar en todos los momentos. Humildad, oh cuantos vales, pero son pocos los que saben llevarla con el don de la identidad. Tener la grandeza humana es un hecho vital para aceptar y no debemos mostrarnos necios del destino. Alguien dijo una vez y ahora se nos recuerda con sabiduría de pueblo…. Y sin embargo se mueve…. Rechacemos toda ordalía y creamos que hay cosas que se pueden hacer. De bulto sabemos que nada sirve como ocurrió en pasados gobiernos, donde todo fue infructuoso, que pasó sin pena ni gloria. No nos contagiemos de tantos barbarismos que fueron y aun son, sin asidero alguno, productos de esos que solo saben rebuznar, hociquear u hollar.

Con sentir épico recordemos la historia para imbricar en nuestro pueblo la memoria que nos conduce a aquellos ancestros que en perspectiva nos muestra el mundo recorrido por los luchadores de esta cuna que sembraron con su sangre grandes ideales. La tiranía es silenciosa, pero después se destruye con la fuerza de la palabra salvadora…. Deber antes que vida…. y nos preguntamos donde está el enemigo? y Zaratustra nos contesta… Esta en el hombre y nos dice…sigue a los animales…. Allí se hallaron muchas respuestas que el hombre ignora. Entonces se preguntará el hombre. ¿Qué es el mundo?  Y este responde… Lo que el hombre quiere que sea…

Cada una de estas reflexiones con fe critica nos llevan como hemos señalado, a repensar el mundo. Po nuestros pueblos han surcado muchos conflictos, diversos dilemas donde se dibujan poderes engendros de la violencia que se han utilizado por los partidos. Elites, monopolios, ácratas y recua de neófitos de la paz, sardónicos de la política que incitan a procrastinar toda actividad a favor de los invisibilizados. La conexión o hiperconexión con el mundo brinda al mundo un futuro lleno de complejidades dentro de la dimensión de encrucijadas, donde asoma siempre el cambio social y del hombre mismo, porque mientras exista la vida hay esperanza.

El desarrollo le introduce al mundo la digitalidad, el complejo algorítmico y la inteligencia artificial, donde todos ellos son una revolución de la ciencia y cada palabra de la ciencia adquiere matices inciertos, controvertibles que advierten para la sociedad moderna la tesis de Nietzsche sobre La muerte de Dios, pero se olvida que hay algo más profundo en la existencia que el mismo profeta anuncia. Y es el hombre superior, créanlo o no, allá cada quien con su Dios personal. Una evolución del crecimiento poblacional va en aumento. Esto nos señala de otra parte que la población joven va tomando las riendas en algunos pueblos. Dicho sector avanza ávido de desarrollo y vinculación en las esferas del país como grupo de apoyo con estrategias y programas muy marcados de tipo social, pero el peligro que esa masa crítica tiene al frente, son los políticos corruptos, como siempre exitosas hordas, bifrontes que se esconden en su doble moral.

El mundo, los pueblos, siguen luchando contra las bacterias terroristas, cuyo lema es la violencia molecular. No a la violencia si a la paz, el derecho a vivir nos exige defender la identidad de la naturaleza, combatir las afrentas con amor social. El acoso del hombre viola el planeta, la justicia no reacciona, los poderes rompen todo equilibrio y el orden de las civilizaciones chocan haciendo viable todo conflicto, pero las fuerzas vitalistas nos conducen a enfrentar riesgos revelándonos la forma de entender el mundo. Los imperios asumen sus competencias con estrategias que advienen una nueva línea de dominio que no hará cambiar la filosofía del amor por la paz que se mueve en medio de utopías posibles con convicción, fe y esperanza-

El desarrollo de nuestro pueblo se convierte en un verdadero vertedero de opiniones, percepciones, mutaciones, alteraciones, debates que profesan muchos daños profundos, porque es típico de nuestra cultura la falta de objetividad, se infunden malicias que van en línea de una oposición reaccionaria. No se atacan las opiniones, ni los argumentos se reprimen. Solo se ataca las conciencias llenas de odios, las mentes distorsionadoras que carecen de principios. Es tal la problemática para gobernar en Colombia por la carencia de idoneidad, capacidad, honradez y confianza de muchos funcionarios para ejercer cargos públicos. El espíritu corrupto es una piramidal encrucijada cuando la gestión pública se politiza, que de inmediato la gobernanza agudiza. Vistas así las cosas cuando el patrimonio del país se compromete y hay pérdidas económicas, dichas personas deben someterse a la justicia con todo rigor. Pero aquí no pasa nada… y muchas veces dichos funcionarios se premian. Los órganos de control se vuelven meros espectadores a sueldo.

Nuestros pueblos viven de sobresaltos y eso los ha hecho fuertes, aunque subsistan declives. La invasión de saberes brota para alumbrar las conciencias de las lógicas humanas y eso es sano para la subsistencia. Una gran gama de circunstancias se nos da para saber y conocer el mundo, sus angustias, sus espacios donde nos movemos para encontrar las vías hacia la paz y el cambio en toda su expresión cósmica, familiar, social y política, y el cómo actuar ante los hechos conflictivos y saber tomar las mejores decisiones con libertad, sin necesidad de autoayudas que esclavizan, que confunden ante los impactos sociales y tener el control político para el cambio que la revolución del amor social nos provee.

Nadan los ‘nadies’, los afros, los indígenas y campesinos en sus indefensos confines, proponiéndose tesis de libertad ante sus pobrezas absolutas como tantos otros ‘nadies’ sometidos a los vaivenes de la indiferencia, con sus gritos de descontento en las primeras líneas, soportando las agresiones de las violentas autoridades públicas que solo conocen de ordenes sin ciencia ni esencia. Con las expresiones públicas el pueblo comunica su sentir, socializan sus anhelos, porque los diálogos o acuerdos carecen de confianza. Los temores ciegan a la humanidad impidiéndole mirar el mundo, y toda América sufre la violación y los acosos de los barbaros con el apoyo de la industria terrorista.

Dios hombre. Hombre dios es la filosofía de los crédulos mientras que los incrédulos diluyen su fe. La dialéctica va y viene dilatando ideologías y los pormenores de las luchas. Nuestros antepasados sucumbieron ante los barbaros imperios. Ellos no son amigos de nadie, su doble moral es su expresión de beneficio. Pero las raíces ancestrales nos dejaron lecciones de vida al doblegar al colonizador y llevarlos al ocaso de los dioses de barro y al cenáculo donde claudicaron los jueces de mármol. Ya los hombres no buscan a su Dios si es que lo tienen. El hombre se desvela orando en su afán de poder a su esfinge humana, para dar vida al manifiesto de su debilidad. Vargas Vila entrego su sentir diciendo…Cuando dejaremos de soñar a la sombra de mis banderas vencidas… La palabra es vida que libera, pero la tiranía es silenciosa. Y el amor ya no sabe de amor.

Con la rebeldía en solitario, el silencio nos convoca a buscar y a estar comprometidos con el vivir los cambios, buscando a si razones de vida colectiva. Este eclipse asoma ante los duelos que habitan en el corazón de los desvalidos, que viven repudiando el peso de los sinsabores, hasta que vaya llegando el nuevo devenir en la conciencia de la historia y sus gentes.

Sustraigámosle a la historia y al mundo social sus saberes, su justicia, su paz…. El advenimiento es un cambio con trazos de un mundo en transición donde se vindica a los débiles y a los pueblos sufrientes como centros de la historia. El siglo de las luces gravita para ver el nuevo devenir histórico, para vislumbrar el sentido de la vida. Convulsan cambios y transformaciones llenando las conciencias de libertad. Y a partir de la acción humana justa, la confianza, la lucha y la resistencia para la emancipación colonial que aun ahoga, entre sueños y desgarramientos, busca las causas injustas, enjuiciando al hombre por su endiosamiento y quienes han ocasionado los errores sociales. El nuevo hombre engalanado con el evangelio del amor social y su hacedor vindicara nuestra responsabilidad ante el devenir de una nueva historia exculpada por las raíces de la libertad de los pueblos.

marsblawyer@gmail.com

* Las opiniones expresadas en este artículo de opinión son del autor y no de BOGOTA ILUSTRADA.