- El proyecto contempla el desarrollo de tres componentes: expediciones ornitológicas, apropiación y diálogo social, y modelo de negocio de aviturismo. Tendrá lugar en cinco localidades cuya avifauna fue muestreada hace más de un siglo por ornitólogos del Museo Americano de Historia Natural: Fusagasugá (Cundinamarca), Honda (Tolima), San Agustín (Huila), Morelia (Caquetá), y Barbacoas (Nariño).
Más de un siglo después, científicos colombianos enaltecen las expediciones que hicieron naturalistas del Museo Americano de Historia Natural liderados por Frank M. Chapman. Para este visionario naturalista estadounidense, más que descubrir especies, su principal interés consistía en entender cómo se distribuyen las aves y cómo evolucionaron en Suramérica, un objetivo de investigación que se renueva con la puesta en marcha del proyecto “Expediciones BIO: Alas, Cantos y Colores”.
Estas nuevas Expediciones BIO buscan incorporar datos históricos y modernos sobre las aves en el territorio nacional, para identificar los cambios en su diversidad genética y poblacional, así como el estado de conservación, teniendo en cuenta los cambios en el paisaje y los efectos del cambio climático, con el fin de formular estrategias de desarrollo sostenible como el aviturismo.
Con las “Expediciones BIO Alas, Cantos y Colores” se generará información importante sobre el impacto de las actividades humanas en las comunidades de aves en los últimos 110 años, la cual será de gran ayuda para pronosticar y prevenir futuros impactos sobre nuestra biodiversidad.
Dado que se seguirán los pasos de Chapman y su equipo, el proyecto se desarrollará inicialmente en cinco localidades cuya avifauna fue muestreada hace más de un siglo por ornitólogos del Museo Americano de Historia Natural: Fusagasugá (Cundinamarca), Honda (Tolima), San Agustín (Huila), Morelia (Caquetá), y Barbacoas (Nariño).
“De manera importante, estas expediciones generarán una oportunidad para los estudiantes y comunidades locales, generando beneficios como el conocimiento y habilidad para monitorear las aves de su localidad, y el desarrollo de proyectos de aviturismo. Estudiantes de las universidades locales cercanas a los lugares de la expedición serán parte de los muestreos y recibirán entrenamiento en metodologías de muestreo ornitológico que les serán útiles en su futuro como biólogos” indicó Mabel Gisela Torres Torres, Ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación.
“Expediciones BIO: Alas, Cantos y Colores” financiadas por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación en el marco de las acciones realizadas por el Programa Colombia BIO y ejecutado por el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt y el Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia, en alianza con la Universidad de los Andes, la Pontificia Universidad Javeriana de Cali, la Universidad de Cornell y el Museo Americano de Historia Natural.
La comitiva la integran diez (10) expedicionarios: cinco ornitólogos de la Universidad Nacional, del Instituto Humboldt y de la Pontificia Universidad Javeriana de Cali y la Universidad de los Andes, así como cinco expedicionarios locales entre estudiantes biología y personas con amplio interés y conocimiento en aves de las localidades seleccionadas. En cada una de las expediciones se realizarán pre-salidas en las que se explorará el terreno, se concertará con las comunidades y se adelantarán los permisos pertinentes para las salidas en campo. Luego se llevarán a cabo las observaciones y el conteo de aves, para finalmente colectar especímenes y hacer un muestreo completo.
Cada una de estas historias permitirá entender cómo la transformación del paisaje afecta las comunidades de aves y, a partir de allí, plantear a futuro las estrategias de conservación para la biodiversidad; no solo en cuestiones espaciales sino en cuestiones climáticas.
“Cuando entendemos qué ha pasado en tiempos pasados podemos predecir o prevenir lo que va a pasar en el futuro. Todos los sitios que vamos a muestrear en las expediciones tienen distintas historias de cambio del paisaje, algunos han sido altamente fragmentados, han perdido mucho hábitat; otros han mantenido su cobertura por mucho tiempo; en otros se ha cambiado sus ecosistemas naturales por agrosistemas”, aseguró Hernando García Martínez, Director General del Instituto Humboldt.
Después de cada expedición, un equipo de científicos con énfasis en procesos sociales visitará las localidades para hacer talleres de apropiación social del conocimiento con los principales actores locales. Durante estos talleres se compartirá toda la información obtenida durante las expediciones y se trabajará con la comunidad para diseñar una estrategia de monitoreo periódico de la avifauna.
Uno de los principales resultados de estas expediciones es el desarrollo de una ruta nacional de aviturismo que incluya las localidades que fueron exploradas, la cual será co-creada por la comunidad local y los ornitólogos involucrados en las expediciones con la colaboración de expertos en estas temáticas.
Noviembre 7 de 2020