Llegan otros vientos, y ahora sí, ni un paso atrás

as-1Por: Fabio A Mariño Vargas

Luego de la trajinada semana anterior con el ‘empate técnico y la remozada uribiana’ tomada también por la sorpresa de no saber qué hacer con esa pírrica mayoría (50 mil votos sobre 12 millones), asuntos que permiten distinguir que solo hay grandes perdedores: los jefes de la campaña del SÍ quienes no supieron darle vida y difusión en el ejercicio excepcional que esta oportunidad requería de la pedagogía política, y también la sorpresa no solo fue para los cicateros aparentes ganadores del NO, sino para los arrogantes directivos’ de la campaña institucional del SI que no estuvieron a la altura de promover y hacer bien su tarea.

Así las cosas, frente a la mentirosa campaña del NO con sus engaños y manipulaciones, también creo que hay unos pequeños vencedores, se trata de miles de personas que sin el apoyo del ‘jefe de campaña santista’ (el Expresidente Gaviria), asumieron como propia la tarea del SÍ y se echaron encima esa carga, defendiendo los acuerdos, aun peleándose contra esa otra manipulación también del SÍ, al decir que “los acuerdos eran la paz”, que “el plebiscito era la paz”, que “se acabó la guerra…”, asuntos que ayudaban a confundir a quienes necesitaban de la educación ciudadana en el campo electoral, y como dije antes, mucho más en esta oportunidad crucial. Pero las euforias, un tanto pedantes, hicieron que un cierto triunfalismo descuidara la seriedad del proceso final plebiscitario echándose a perder esta oportunidad, bien utilizada al otro día por los raptores del NO, aprovechándose de esa ventaja democrática y haciendo que casi naufrague ésta rota nave de la paz.

as-2

Pero llegaron nuevos vientos para oponerse al despotismo a manera de refuerzos y apoyar ‘el sentimiento de querer vivir en paz’; creo en expresiones populares y masivas en otros escenarios, también democráticos, como la calle, la plaza, la solidaridad, la marcha, la protesta ciudadana, los cabildos abiertos y los campamentos de paz, ahora regándose por la geografía nacional… y no solamente en el ejercicio electoral; y, esta vez, la cola del huracán caribeño arrastró el premio Nobel como el mejor reconocimiento y galardón que el Comité Noruego hace al decir que es “…un homenaje al pueblo colombiano que, pese a la grandes pruebas y los abusos que ha sufrido, no abandonó la esperanza de una paz justa, y para todas las partes que han contribuido al proceso de paz… El homenaje es sobre todo, para los seres queridos de las innumerables víctimas de esta guerra civil…”. Bien dicho por la vocera del Comité al anunciar el premio en la madrugada del pasado jueves 6 de octubre, por lo que se colige que no es solamente para un Presidente como tal.

Y ya finalizando la movida y casi aciaga semana pasada, se escucharon ruidos de toda índole; el más, seguía siendo el producido por las, otra vez, amañadas propuestas de los ‘NOES’ que aún no se ven; pero de Caracas llegaron brisas con noticias atrayentes que este lunes (10 de octubre) se volvieron la otra realidad también esperada y demandada por los que ‘queremos vivir en paz’ al firmarse la nueva etapa de conversaciones entre el Gobierno y el ELN y definiendo fecha de iniciarlo públicamente en Quito el próximo 27 de este mes.

as-3

Entonces, el ventarrón del NO despertó, a mi modo de ver, otras formas de expresión y de participación en democracia, de hacer y reclamar acciones de paz que se están viendo en las  calles con las múltiples presencias en distintas y ricas formas de decir y hacer lo posible para que lo avanzado en ‘dialogar, acordar en vez de echarnos tiros’, no sea atravesado malignamente por la soberbia y caciquismo, por envidias y malquerencias que se oponen a este propósito y acuerdos; y, vale decir entre otras cosas, al que mucho le falta para llegar a la verdadera paz con justicia social, (aquí se debe leer: los problemas que siguen sin perturbación alguna como la depredación institucional contra el medio ambiente en la extracción minera perversa, los ruidos de la reforma tributaria, los apetitos afanados de campañas que ya despuntan en las inauguraciones carreteables y de puentes por doquier, los temores avivados por las cantinelas de los paramilitares…), trampas y barreras que enemigos agazapadas y púbicos de la paz, a diario le ponen a esta voluntad de cambio y que debemos despuntar por encima de los embelecos belicistas y seguir construyendo, entre todos, la alegría y la felicidad y los caminos de futuro hacia la reconciliación.

Sigamos en la certeza de la vida invocando nuevos vientos que empujen los tiempos de la inteligencia y progresar en el quehacer más digno de la vida: luchar por el respeto ajeno y la alegría en los campos de la patria.

www.periodicoeldiario.com

Leave a Reply

Your email address will not be published.