Ocho departamentos de la costa colombiana están completamente paralizados y población permanece confinada en sus viviendas por la amenaza del “paro armado” ordenado por el Clan de Golfo en represalia por la extradición a Estados Unidos de su máximo jefe, Dairo Antonio Úsuga, alias “Otoniel”.
Los departamentos más afectados son Antioquia, Atlántico, Bolívar, Cesar, Chocó, Córdoba, Magdalena y Sucre, en donde el comercio y el transporte en la mayoría de municipios está completamente paralizados, Igualmente, el desplazamiento de vehículos y la movilidad de las personas por las carreteras de estos departamentos a causa del miedo y la zozobra ante la amenaza del grupo paramilitar también está paralizado. La comunidad informó que al menos ocho vehículos fueron incinerados.
En panfletos difundidos en diferentes regiones del país, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como también se conoce a este grupo, anunciaron que el paro armado durará cuatro días y que quienes no “acaten la orden” serán “dados de baja”.
Alias “Otoniel” fue extraditado por el gobierno de Iván Duque ayer 5 de mayo, para que comparezca ante una corte de Estados Unidos por delitos de narcotráfico. La extradición se produjo cuando se aprestaba a declarar ante la Corte Suprema de Justicia sobre los vínculos de políticos y militares con esta organización paramilitar.
Desde la noche del miércoles, cuando comenzó el paro armado del ‘clan del Golfo’, y hasta este viernes en la tarde, se habían registrado 93 acciones violentas en 61 municipios de ocho departamentos.
Antioquia, el departamento más afectado
En Antioquia el presidente de la Asociación de Transportadores de ese departamento, Juan Ruiz, dijo a medios locales que tienen información de que en diferentes carreteras han sido quemados seis vehículos.
“Tenemos alrededor de seis vehículos que fueron incinerados”, dijo Ruiz quien agregó que varias carreteras están afectadas por el “paro armado”.
Los municipios de Puerto Valdivia, Tarazá, Caucasia, Nechí, El Bagre y Apartadó son los más afectados por las acciones terroristas del Clan del Golfo.
Paro violento en el caribe
Entre los afectados hay ciudades capitales, como Barranquilla y Montería. En esta última, gran parte del comercio de la ciudad fue cerrado. Allí han sufrido por cuenta de la quema de 101 automotores, 36 de estos en vías nacionales.
El gobernador de Sucre, Héctor Olimpo Espinosa, pidió a los habitantes de ese departamento “tener especial precaución en los traslados y movilizaciones ante las retaliaciones” del Clan del Golfo.
“Sabemos que se han presentado atentados contra infraestructuras, maquinaria; contra algunos medios de transporte, y que hay otras alertas contra infraestructuras públicas”, explicó Espinosa.
Detalló que en la población de Sincé cinco hombres armados quemaron maquinaria de una firma contratista que construye una carretera, y que además un autobús de servicio intermunicipal fue incendiado.
En el departamento de Córdoba varios alcaldes informaron que los comerciantes de Cereté, Tierralta, Valencia, San José de Uré y Montelíbano, han sido amenazados.
En varios municipios de los departamentos afectados se suspendieron las clases, pues no hay garantías para que los estudiantes y docentes se desplacen.
Igualmente, el Consejo Académico de la Universidad de Córdoba suspendió sus clases hasta el 9 de este mes “debido a las dificultades presentadas en la prestación del servicio público de transporte intermunicipal, expresadas por estudiantes para trasladarse desde sus lugares de residencia”.
En Barranquilla, principal ciudad del norte de Colombia, dos hombres intimidaron con armas a los pasajeros de un autobús de servicio público y los obligaron a apearse para luego prender fuego al vehículo, tras lo cual fueron capturados por la comunidad y entregados a las autoridades.
En varias zonas de la costa caribe las paredes de varias viviendas y comercios amanecieron con pintadas alusivas a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia.