El secretario de Seguridad de Bogotá, Daniel Mejía, anunció que la Administración de Enrique Peñalosa junto con la Policía Metropolitana de Bogotá, ofrece una recompensa de hasta $5 millones a quien de información que permita la captura del hombre encapuchado que lanzó a un bus de Transmilenio, con pasajeros a bordo, una granada de gas lacrimógeno.
La acción del hombre se produjo durante las protestas de ciudadanos que se quejaban por el mal servicio del sistema TransMilenio y las altas tarifas, protestas que se iniciaron en el municipio de Soacha y continuaron en el sur de Bogotá y que se tornaron violentas cuando intervino el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD).
Las refriegas entre el ESMAD y los manifestantes generó pánico entre las personas que a esa hora caminaba hacia sus trabajos, en el sector del Perdomo, cerca al Portal del Sur, un sujeto sin identificar recogió del suelo una de las tantas bombas lacrimógenas disparadas por el ESMAD y la arrojó al interior de un articulado lleno de gente.
Rápidamente las personas que estaban cerca del bus de TransMilenio corrieron a socorrer a las personas atrapadas en el interior del bus que pedían desesperadas auxilio. Al final todos abandonaron el vehículo y no se presentaron heridos.
La Policía Metropolitana de Bogotá asumió la investigación para establecer la identidad del hombre que tomó el gas lacrimógeno del piso y lo arrojó al interior del bus de TransMilenio.
“Este trabajo de investigación directa contra este joven lo está haciendo la Sijín de un sistema de video más profesional porque se tomó desde un celular y vamos a determinar para identificar esta persona que es un acto criminal”, explicó el comandante de la Policía de Transmilenio, coronel Néstor Melenje.
De acuerdo con la recién posicionada gerente de Transmilenio, María Consuelo Araujo, el responsable de arrojar el gas y quienes provocaron los desmanes en el sur de Bogotá y Soacha, podrían pagar una condena de entre cuatro y ocho años de prisión. Hasta el momento, la policía anunció la captura de 14 personas durante las refriegas entre manifestantes y el ESMAD.
Febrero 15 de 2018