Aterradoras, a si calificaron delegados internacionales las cifras de mujeres víctimas de la violencia publicadas por el Registro Único de Víctimas del conflicto armado, las cifras se conocieron en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer.
El grave impacto que el conflicto armado en Colombia ha tenido en la vida y el cuerpo de las mujeres, se refleja en las 4.361.511 mujeres incluidas en el Registro Único de Víctimas del conflicto armado por distintos hechos victimizantes, hasta el 1 de noviembre de 2018, y que constituyen el 52% del total de víctimas registradas. Entre ellas hay 23.949 mujeres víctimas de delitos contra la libertad y la integridad sexual.
El hecho por el cual más mujeres se encuentran incluidas en el Registro es el desplazamiento forzado con 3.799.561 mujeres. Le siguen el homicidio 461.550, las amenazas 203.058 y la desaparición forzada con 78.828 mujeres. En el listado aparecen luego otros hechos con menor cantidad de víctimas, pero no por ello menos graves.
La reparación integral a mujeres víctimas es una prioridad de la Unidad para las Víctimas, por lo cual les brinda atención diferencial, integral y dignificante, con enfoque de derechos, de género y transformador, para dar respuesta a las necesidades particulares y a los impactos que en ellas ha tenido la guerra.
Ramón Alberto Rodríguez Andrade, director (e) de la Unidad para las Víctimas hace un llamado a la eliminación de la violencia contra la mujer: “La mayoría de las víctimas registradas del conflicto armado son mujeres, por diferentes hechos, pero nos llama mucho la atención que haya casi 24 mil víctimas de violencia sexual; nos unimos a esta campaña internacional y hacemos un llamado para que ningún hecho sea factor para incentivar la violencia contra la mujer. Desde la Unidad, todos los funcionarios nos unimos, hablando un solo lenguaje, frente a la eliminación de la violencia contra la mujer”.
De las casi 24 mil afectadas por violencia sexual, 7.892 han sido indemnizadas, hasta septiembre de este año, por un valor total que supera los 153.000 millones de pesos.
Como parte del acompañamiento a las víctimas de este hecho, en 2018 la Unidad lideró la presentación de un informe de mujeres afectadas por violencia sexual ante la Jurisdicción Especial para la Paz.
La indemnización es solo una de las medidas contempladas en la reparación integral. Otra medida es la recuperación emocional, la cual ha sido asumida por la Unidad a través de una estrategia basada en la Ley 1448 de 2011, en la que han participado 2.675 mujeres víctimas de violencia sexual.
En general, 20.862 personas han sido atendidas por medio de la estrategia de recuperación emocional a nivel individual en todo el país, y de ellas el 72% han sido mujeres afectadas por distintos hechos.
Como complemento a la entrega de las indemnizaciones, la Unidad para las Víctimas ofrece talleres de educación financiera para la inversión adecuada de esos recursos. Hasta el 01 de noviembre de este año, la entidad indemnizó a 497.814 mujeres sobrevivientes de distintos hechos durante el conflicto armado, de las cuales 104.392 han participado de manera voluntaria en el taller de educación financiera. Constituyen el 63% de las 165.493 personas participantes.
La Unidad para las Víctimas se unió a la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y manifestó que seguirá trabajando de la mano de las mujeres víctimas para que accedan al derecho a la reparación integral.
La violencia contra la mujer existe en todas las sociedades y tiende a exacerbarse durante los conflictos armados y en las situaciones de posconflicto. Solo en las últimas décadas ha empezado a denunciarse, aún con mucho temor por parte de las víctimas.
Por esa razón, la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) emitió en 1993 la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer. En ella se define la violencia contra la mujer como “todo acto se violencia que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o sicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.
Noviembre 27 de 2018