Un actor y una bailarina exploran el tema de la memoria, el olvido y la esperanza. Se sumergen en las ficciones provenientes de los encuentros y entrevistas a artistas de Colombia y Portugal con la expectativa de permanecer en la memoria del público.
Tras una exitosa temporada en Lisboa, el actor y director portugués Elmano Sancho junto a la bailarina colombiana Juanita Barrera presentan su nuevo espectáculo de teatro “No quiero morir”, una pieza que trae a la memoria artistas olvidados por el público.
La obra se propone luchar contra imposibilidad de recordar, por intermedio de un soporte tan efímero como el teatro. Dos cuerpos (aun) jóvenes habitan memorias e historias de artistas viejos olvidados. Esperan rescatarlos, engañar al destino y cambiar el curso natural de los acontecimientos. Hablar a través de sus voces es también para ellos, la única posibilidad, aunque efímera, de desafiar la eternidad y no morir. El espacio escénico, indefinido, es el lugar donde coexisten las memorias de todos y el tiempo es el de la memoria. La tentativa de rescate es breve, dura el tiempo de cada función.
“No quiero morir” surge en el 2015 cuando Elmano y Juanita se conocen trabajando y estudiando con la SITI Cpmmapny en Nueva York. Asisten a la proyección de un documental sobre la Annie Girardot, quien fue famosa por el personaje de Nadia en «Rocco y sus hermanos” de Luchino Visconti en 1960, pero que culmina su vida en una difícil batalla contra el Alzheimer. Ese fue el punto de partida para una investigación que los pone en contacto con artistas portugueses y colombianos para construir un texto fragmentario, a partir de una variedad de voces y experiencias. Historias particulares de artistas mujeres y hombres, con características similares a las de Annie, retirados del mercado, olvidados por el público y/o con problemas o enfermedades que afectan la memoria. Tienen en común en sus historias, dificultades de salud, económicas, familiares, así como sueños y anhelos, lamentan el envejecimiento y el olvido.
A lo largo del espectáculo, se recrea la escena de la muerte de ‘Nadia’, quien también se cierne como un fantasma, uniéndose a Annie Girardot que, sin duda, está siempre presente… En “No Quiero Morir” Annie cree que al impedir la muerte de su personaje en la película de Visconti conseguirá cambiar, no solo, los últimos años de su vida, marcados por la enfermedad y la pérdida de memoria, así como su matrimonio con Renato Salvatori.
“Cuando me preguntan por qué quería ser actor, probablemente es porque no quiero ser olvidado, es porque busco, de alguna manera, una cierta forma de eternidad que es propia de la condición humana. Todos sabemos que vamos a morir, pero siempre tratamos de luchar contra ello de alguna forma. El actor siempre trata de dejar una huella en sus personajes… Annie Girardot dejó muchas huellas… Estas personas que entrevistamos no tuvieron tanta suerte.” Afirma Elmano.
“No quiero morir” es una coproducción colombo-portuguesa: Culturproject, São Luíz Teatro Municipal, Espaço do Tempo y GRETA: plataforma en movimiento en asociación con la Fundación Teatro Nacional. Cuenta con el apoyo de Cancillería-Embajada de Colombia en Portugal, Embajada de Portugal en Colombia – Instituto Camoes, Armazem 22 y Fundação GDA. Es un proyecto financiado por la República Portuguesa, Cultura / DGArtes – Direção-geral das Artes.
“No quiero morir”
Funciones: jueves y viernes 8.30 p.m. y sábado: 6:00 p.m. y 8:30 p.m. Hasta el 18 de marzo
Boletería: $26.500 (General) – $20% dcto. (Estudiantes y tercera edad)
Lugar: Casa del Teatro Nacional, Bogotá.