El contralor de Bogotá, Julián Ruiz, informó que se encontraron hallazgos en el proceso de pagos hacia el Distrito por parte de la concesión APP, suscrita por el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), dejando un posible detrimento patrimonial de 11.000 millones de pesos.
De acuerdo con el contralor, no se está realizando el debido control de la explotación comercial del lugar que puede albergar hasta 30.000 personas, por lo que debe existir una inspección mayor, por parte del Distrito para saber que se hace con el dinero recaudado.
“Allá hay unos hallazgos en el Instituto de Recreación y Deporte, lo que consiste en básicamente en que, al parecer, no ha habido el suficiente control sobre las áreas y dependencias físicas de explotación comerciales, al parecer, superan las establecidas”.
Asimismo, explicó que las ganancias del establecimiento no están siendo avisadas en nombre de la concesión y el IDRD debe mirar los beneficios que estaría recibiendo a pesar de que el sitio haya sido construido, en su mayoría, por parte de una empresa privada.
“Para ser explotadas por parte del concesionario y eso requiere un mayor control por parte del Instituto, presuntamente se han dejado de percibir, por parte del Instituto, algunos dineros por explotación comercial de más de 11.000 millones de pesos”, indicó el contralor.
Julián Ruiz aseguró que se está revisando la situación en la Contraloría de Bogotá para determinar si estos hallazgos corresponden a irregularidades dentro de la concesión o la administración distrital, empezando el estudio en los próximos días.
El funcionario manifestó que el objetivo de la Contraloría es investigar los contratos o acciones no solo del Distrito, sino que de otras entidades donde haya pérdida de recursos.
El organismo concluyó que se sigue revisando el contrato del Metro de Bogotá, las auditorías de los requerimientos de las ambulancias adquiridas por el Distrito y la indagación sobre los cementerios distritales.