Unos investigadores consiguieron localizar el cráter desde donde se desprendió esta roca espacial que llegó a la Tierra en 2011. Los expertos creen que esta roca podría ayudar a entender la formación de varios planetas.
Un grupo de científicos logró identificar el lugar de origen de “Black Beauty” (Belleza Negra), un meteorito marciano hallado en el Sáhara en 2011, el cual podría servir para ayudar a desentrañar los orígenes de la formación de la Tierra y otros planetas del Sistema Solar, según se detalla en un estudio publicado el martes (12.07.2022) por la revista Nature.
El equipo ha logrado identificar de qué región de Marte proviene el pedrusco, y su particular composición mineral promete revelar ahora detalles de los primeros instantes de nuestro planeta.
Una de las rocas “más antiguas en la historia de la geología”
El meteorito cabe en la palma de la mano, pesa poco más de 300 gramos y es “una de las rocas más antiguas en la historia de la geología”, explicó el coautor del informe y planetólogo Sylvain Bouley. La roca espacial contiene zircones, el mineral más antiguo que se conoce en la Tierra, de 4.480 millones de años de edad. Es decir, “aproximadamente 80 millones de años después del inicio de la formación de los planetas” del Sistema Solar, explicó Bouley, profesor del laboratorio de Geociencias de la universidad de Paris-Saclay.
El meteorito, también llamado NWA 7034, es un “libro abierto sobre los primeros instantes de Marte”, cuando su superficie de magma empezó a solidificarse. El incesante movimiento de las placas tectónicas ha ido sepultando y desintegrando los materiales primigenios de nuestro planeta Tierra. Algo que no ocurrió en Marte.
En búsqueda del cráter de origen
El equipo de científicos, liderado por la universidad Curtin de Australia, logró la proeza de identificar el cráter marciano de donde proviene originalmente el meteorito NWA 7034. Esta formación está situada en una región cuya corteza no cambió sustancialmente desde la formación del Planeta Rojo.
Para lograr identificar el cráter exacto, los científicos tuvieron que estudiar 8.000 formaciones de ese tipo existentes en la superficie de ese planeta. Gracias a la medición de la exposición a los rayos cósmicos del NWA 7034, los planetólogos fueron capaces de determinar que el meteorito cruzó el espacio hace unos cinco millones de años.
La inteligencia artificial ayudó a identificar el cráter de procedencia
Con la ayuda de una supercomputadora, Anthony Lagain y su equipo lograron procesar 90 millones de fotos de cráteres marcianos. Una preselección arrojó 19 imágenes. De esas, la computadora sugirió la fosa de Karratha, un cráter de 10 km de diámetro que se halla en “una región muy antigua del hemisferio sur, rico en potasio y torio, como Black Beauty”, explicó Lagain.
Esa región, además, está muy magnetizada, como sucede con el meteorito que llegó a la Tierra. La zona es “probablemente una reliquia de la corteza más vieja de Marte”, aseguró el estudio.