17 de abril – Día Mundial de la Hemofilia

En medio de la pandemia, muchos pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles, como el cáncer o algunas enfermedades huérfanas, has visto sus tratamientos atrasados o comprometidos en cierta medida, como es el caso de hemofilia.

La hemofilia es una enfermedad hereditaria caracterizada por hemorragias difíciles de controlar ante cualquier herida o trauma. El sangrado excesivo, los moretones en el cuerpo, la hinchazón y el dolor en las articulaciones son algunos síntomas de alerta; las personas que viven con Hemofilia pueden sangrar de manera espontánea en lugares como las rodillas, tobillos y codos.

No obstante, el mayor reto al que se enfrentan los pacientes son los sangrados internos, que en muchos casos pasan desapercibidos y pueden ocurrir en diferentes partes del cuerpo, como el cerebro. Si bien la hemofilia es una enfermedad que no tiene cura, tiene tratamiento. Actualmente existen opciones que se enfocan en prevenir y tratar las hemorragias.

En Colombia, según el último reporte de la Cuenta de Alto Costo, 2530 personas tienen la enfermedad y cerca del 56% de los pacientes la padecen en su forma severa.

Se transmite de madre a hijo y afecta, en el 99% de los casos, a los hombres. Disminuir los episodios de sangrados es fundamental para que los pacientes y sus familias puedan tener mejor calidad de vida.

INFOGRAFÍA